Pablo Bossio bajó su candidatura

El comunicado de Bossio en Redes Sociales

Es hora de decir adiós.

Después de casi 13 años, tras mucha reflexión y escuchar a mi familia, he decidido declinar una nueva postulación para presidir a mi querido Club Santamarina.

Han sido años de arduo trabajo y dedicación dirigencial. Años en los que he tenido la oportunidad de crecer personalmente, hacer amigos y sumergirme en el universo del fútbol argentino desde sus entrañas. Años de grandes logros deportivos e institucionales. También, claro, han sido años en los que hemos tenido que enfrentar dificultades deportivas y limitaciones de recursos.

Cuando asumí a los 30 años, en 2011, imaginaba un club diferente. Un club grande. Recuerdo cómo se encontraba Santamarina en aquel entonces. Sin predio propio, alquilando espacios, con inhibiciones por resolver, sin cuenta bancaria por rechazo de cheques, con escasos jugadores propios y habiendo luchado contra el descenso la temporada anterior. Trabajamos arduamente con mis compañeros dirigentes, cada uno desempeñando un papel importante en diferentes etapas, y finalmente, después de una larga lucha y apariciones en los diarios nacionales -que decían que íbamos a construir un country- logramos contar con un predio donde hoy en día podemos jugar como locales, entrenar con nuestro plantel profesional y divisiones inferiores, y sobre todo, seguir proyectando nuestro crecimiento futuro. Durante este tiempo, hemos dedicado mucha energía a la construcción de nuevas instalaciones -vestuarios, baños, salas, utilería, campos de juego con riego e iluminación led- y también hemos brindado oportunidades profesionales a decenas de jóvenes de Tandil y la región que han firmado sus primeros contratos como futbolistas.

Guardo en mi memoria los partidos que disputamos contra los cinco grandes del fútbol argentino. En dos ocasiones contra Boca Juniors por la Copa Argentina, una vez contra Independiente en la misma competición y una vez con River Plate en pretemporada. También recuerdo el partido contra el Shangai de china en la celebración de nuestro 99º aniversario. Las veces que nos enfrentamos a Racing Club y San Lorenzo en estadios San Martín repletos de gente. Los amistosos contra equipos de primera división. No puedo olvidar que le ganamos a los dos clubes más importantes de Tucumán, a todos los equipos de Córdoba, excepto Belgrano, y a los clubes mendocinos. Recorrimos de punta a punta nuestro país ganando en casi todas las provincias. Podría seguir enumerando anécdotas con los clubes de Buenos Aires, como Chacarita, All Boys, Chicago o Ferro Carril Oeste, a los cuales hemos vencido de manera épica. Además, se suman las finales perdidas y el campeonato Federal A que ganamos en Gualeguaychú en 2014, con caravana incluida por Tandil. Seguramente me estoy olvidando de muchos otros partidos y momentos. Ha sido realmente una gran cantidad. No quiero dejar de mencionar a los grandes jugadores que hemos contratado (casi 400 en todo este tiempo), a los entrenadores, a los profes, médicos, todos ellos forman parte de mi historia en el club. Es una historia que hemos construido juntos.

Entiendo que es tiempo de dar paso a nuevos dirigentes que sigan pensando en un Santamarina aún más grande. Incluso más grande de lo que yo había imaginado. Creo en el valor de la alternancia y siempre estaré dispuesto a colaborar en todo lo que esté a mi alcance para que el club siga creciendo.

Agradezco a mi familia por comprender mi dedicación durante todo este tiempo, a mis amigos, compañeros y amigos de comisión, socios e hinchas que me han apoyado.

Gracias Santa!